El reloj
marcó las 15.45 lo que indica que terminó mi horario laboral, apagué la
computadora, tomé mi cartera y el pequeño bolso de viaje y me dirigí a la terminal de ómnibus de la Ciudad de La
Plata. Mi destino era la Estación de Trenes
de Retiro allí habría de abordar la línea San
Martin con destino a Rawson.
En ese pequeño
pueblo se encuentra el Monasterio de la “Natividad del Señor y San José”
perteneciente a los “Siervos reparadores del Corazón Eucarístico de Jesús”.
Ellos constituyen una naciente comunidad religiosa fundada
por el P. Alejandro Gwerder en
2007, en la Archidiócesis de Mercedes- Luján (Argentina).
Los religiosos llevan vida cenobítica, es decir estable y con obediencia al Superior. Además
el carisma es contemplativo y activo. Se
dedican al rezo Coral de la Liturgia de
la Horas y a diferentes apostolados con jóvenes y familias. Adoptan el Rito Tridentino para la Santa Misa,
lo cual a mi me resultó maravilloso.
El lema es “Instaurare omnia in Christo”
y sinceramente he visto ese trabajo en marcha desde hace tiempo y últimamente en
el Curso-Convivencia Rawson, que se extendió desde el 14 al 20 de Enero, siendo
el segundo, el primero se realizo el año pasado hacia la misma fecha.
Los temas del Curso fueron:
§ Martes 15: La cultura de la muerte: sus preceptos y prosélitos secuaces.
§ Miércoles 16: Los bicentenarios de la Patria: Creación de la Bandera
Nacional, Éxodo jujeño, Batalla de Tucumán, La Virgen Generala, Batalla de
Salta, Batalla de San Lorenzo.
§ Jueves 17: La cultura de la muerte: sus preceptos y prosélitos secuaces (II)
§ Viernes 18: Los Supuestos del Testimonio Cristiano: "¿Qué debo hacer para
alcanzar la Vida Eterna?" -
Pbro. Alejando Gwerder.
§ Sábado 19: La vida antes de Nacer: Aspectos generales de la concepción/fecundación,
la manipulación genética e implicancias bioéticas desde el Magisterio de la
Iglesia.
Alli se hizo hincapié en la formación
integral de los jóvenes católicos que asistimos y resulto ser un momento
privilegiado para generar o fortalecer lazos con otros que al igual que uno trabajan
verdaderamente por el Reino de Dios instaurando
todas las cosas en Cristo.
Por motivos laborales solo pude
asistir el fin de semana, llegando el viernes por la noche. La caridad fraterna
podía olerse desde la estación de trenes donde fueron a recibirme varios
amigos. Luego de cenar, se dieron lugar a los juegos nocturnos en el jardín de
la Casa de Retiros que ocupábamos. Fue realmente divertido, no solo eso sino la
inocencia, la alegría y el fervor de todos lo que habían pasado toda la semana allí
era edificante, me sonó mucho al “Mirad como se aman” de las primeras
comunidades cristianas.
Reconstruí la semana por testimonios
de mis amigos, de lo cual surge que las
conferencias fueron muy buenas y esclarecedoras, sobre todo las dedicadas a
aspectos próvida.
Sin duda la mejor conferencia para
los asistentes fue la pronunciada por el P. Gwerder, Los
Supuestos del Testimonio Cristiano: "¿Qué debo hacer para alcanzar la Vida
Eterna?”. La cual
invito a la reflexión sobre la amistad verdadera, el uso de las redes sociales
y el peligro que representa el mundo que atrae
y envuelve haciendo que los mismos católicos no sean más que una
caricatura de lo que deben ser.
Además de la formación hubo Fogones, con
guitarreada y números artísticos improvisados por los participantes a eso, se sumo el
Coro formado ad hoc para la Santa Misa.
En fin todo terminó con el almuerzo del día domingo, una larga mesa donde compartimos el clásico "asado argentino" junto a los frailes y a quienes colaboradoraron para llevar a cabo la jornada.
Llegó el momento de partir, no sin sentir el famoso "fuego del fervor" del que hablan muchos santos y rogandole a Dios la gracia de volver el próximo año.
¡Nos vemos!
pd: No me olvido del artículo sobre "mujeres y pantalones", Dios mediante el viernes lo publicaré.